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El Kintsugi o la belleza de las cicatrices, nos permite ver luz a través de las grietas, hallar placer en la reparación y unir en un solo objeto, las piezas perdidas.
Estamos todos rotos, así es como entra la luz, escribía Ernest Hemingway. Y nada ha interpretado esta metáfora con más belleza, que el arte japonés del Kintsugi.
El mundo logra agrietarnos. Llenarnos de fisuras. Y el mundo profesa el credo de la rotura como fin.
El Kintsugi nos invita a pensar distinto.
Afirma que es ahí, precisamente la cicatriz, donde ocurre el comienzo. La herida, la rotura no es más que la mejor razón para enfrentar al mundo y volver a empezar.
El kintsugi es el arte japonés que celebra la historia de cada objeto al exponer sus fracturas en lugar de ocultarlas o disimularlas.
El arte se construye sobre la filosofía japonesa del wabi-sabi, la que sostiene la exaltación de la belleza de la imperfección; con el mottainai - sentimiento de dolor que nace del desperdicio-; y de la idea del mushin, la invitación a abrazar las transmutaciones.
La estética japonesa del Wabi Sabi nace de la búsqueda de la belleza en la imperfección. Afirma que la naturaleza es perfecta, debido a sus imperfecciones. La belleza Wabi Sabi intenta imitar esa eterna paradoja y el resultado es fabuloso.
El tradicional arte de reparar piezas de cerámica rotas utiliza, en lugar de un pegamento, esmaltes especiales espolvoreados con oro, plata o platino; y estilísticamente se clasifica según tres técnicas: grieta, método de pieza y convocatoria conjunta.
Grieta
Es la técnica de Kintsugi más conocida, la que usa una cantidad mínima de resina de material precioso, desvelando un fabulosa trama de cicatrices de oro.
Convocatoria conjunta
La técnica utiliza piezas de formas similares de otras piezas rotas, combinando dos obras estéticamente diferentes en una singular obra unificada.
Método de pieza
La técnica conocida como método de pieza trabaja con fragmentos de reemplazo hechos completamente de resina de oro, plata o platino.
Carpintería dorada sería una traducción poética del concepto Kintsugi. Una carpintería que entiende que las roturas y las venas que nacen de sus reparaciones forman parte de la historia de un objeto y deben mostrarse en lugar de ocultarse. Así, al poner de manifiesto su transformación, las cicatrices embellecen las cosas.
Imagen de portada: @denis_olgac para @sucukundbratwst
