Él sabe que ella es el cuerpo de la inmaterialidad de su música. Ella sabe que su música es el ánima que la habita y levita. Hay una alquimia entre Carolina Fleitas y Fabian Aguilera que antecede y excede el hecho musical. (Del que la música y la danza son el cóncavo para su convexo). Lo cierto es, que aquellos dos, no saben de hacer nada más que no sea hacer el amor.
Nadie sabe si ella baila la música que el Chivo toca; o si por el contrario, es él quien espeja con su música lo que el cuerpo de ella narra.
Lo cierto es que, después de 20 años juntos, aquellos dos, cuando hacen, hacen el amor.
Carolina era una profe y bailarina árabe, separada y madre de dos cuando entró al bar Pórtico sobre calle San Martín con su carpetita de currículum en mano.
El Chivo era un rockero cuando Carolina entró al bar Pórtico sobre calle San Martín con su carpetita de currículum en mano.
Lo cierto es que, de ese Pórtico, ya nunca más volvieron a salir los mismos.
Desde entonces, cuerdas de bajo, tendones de piernas, venas de brazos forman una criatura casi mitológica - absolutamente amorosa, amante y musical- que la escena de la música patagónica conoce como Música Chiva.
Lo que pasa arriba del escenario cuando pasa Música Chiva; lo que sale de sus gargantas; lo que tocan sus manos; lo que baila ese vientre; nace mucho antes de ese escenario.
Hay una alquimia entre Carolina Fleitas y Fabian Aguilera que antecede y excede el hecho musical. Ahí sucede una historia de amor. Vendaválica, armónica, caótica, poética, eléctrica, nube, pluma. Del que la música y el baile son el cóncavo para su convexo.
“No tiene forma ni estrategia ni coreografía. Un sentir a su música .Es perfecto. Es comunicarnos en ese entorno también”, nos pone en palabras Carolina.
Actualmente el dúo trabaja en el lanzamiento de su último EP “Danza Caótica” que presenta tres canciones: “Eléctrica”, “Nube” y “Pluma”. “Es una energía fémina que arrasa con estas tres canciones. Letras vinculadas a la realidad del Valle, de las personas. La vibración de las personas del Valle. Universos nuevos sonoros, timbres nuevos, para que la danza pueda fluir, danzas nuevas, intensidades, otro tipo de ataques con el cuerpo.” nos ancla su obra Fabian.
“No sabíamos nada, pero sabíamos que no era por dónde nos habían enseñado que tenía que ser.” La Música Chiva es más que un dúo musical. La música chiva es el sonido al que suena su historia de arte y amor.
Lo que en uno falta, en el otro flota. Lo que en uno habita, en la otra levita. Y esquirlas de aquello, siempre su música.