"El destino ha ordenado que los hombres que fueron a la Luna para explorarla se queden en ella para descansar en paz. Estos valientes hombres saben que no hay esperanza de que sean rescatados. Pero celebran la esperanza para la humanidad en su sacrificio."
El discurso escrito por asesores presidenciales en 1969 para ser leído en caso de ocurrir una tragedia con los astronautas enviados a la Luna por primera vez permaneció oculto por muchos años hasta que un grupo de investigadores revelaron el manuscrito y lo difundieron masivamente.
A continuación su traducción completa:
"El destino ha ordenado que los hombres que fueron a la Luna para explorarla se queden en ella para descansar en paz. Estos valientes hombres, Neil Armstrong y Edwin Aldrin, saben que no hay esperanza de que sean rescatados. Pero saben que hay esperanza para la humanidad en su sacrificio.
Estos dos hombres están entregando su vida en favor de la verdad y el entendimiento. Serán llorados por sus familias, su nación, la gente del mundo y la Madre Tierra, que envió a dos de sus hijos a lo desconocido.
En días antiguos, los hombres miraban a las estrellas y veían a sus héroes en las constelaciones. En estos tiempos modernos, hacemos lo mismo, pero nuestros héroes son hombres épicos de carne y hueso.
Otros seguirán sus pasos y volverán. La búsqueda del hombre no se detendrá. Pero ellos fueron los primeros, y así los recordaremos en nuestros corazones. Ya que cada ser humano que mire hacia la Luna en todas las noches por venir sabrá que existe alguna esquina en otro mundo que por siempre será parte de la humanidad".
Afortunadamente, la historia les tenía guardado destino de grandeza y la misión fue un éxito. Richard Nixon realizó la llamada más histórica de la Casa Blanca. Desde un teléfono los contactó a más de 300,000 kilómetros de distancia a la Luna para expresarles sus felicitaciones:
“Esta es ciertamente la llamada más histórica que se ha hecho desde la Casa Blanca. Por lo que han hecho, los cielos se han convertido en parte del mundo del hombre, y mientras nos hablan desde ese mar de tranquilidad, nos inspiran a redoblar nuestros esfuerzos por traer paz y tranquilidad a la Tierra.”